Después de varios años de crisis, Venezuela vuelve a la mesa de negociación entre el oficialismo y la oposición.Se trata, a todas luces, de una buena noticia para ese golpeado país, como para América Latina testigo del peor drama migratorio de su historia que hoy tiene a 6 millones de venezolanos en el exilio, panorama desolador solo comparable a la situación de los refugiados de Oriente Medio que, desde hace varios años, pretenden llegar a otros lugares huyendo de la violencia.