My life: bioethics, cinema and end of life care
Artículo académico
Visión General
Visión General
Abstracto
Los cuidados paliativos deben entenderse desde una perspectiva más amplia que la noción de medicina paliativa, ofreciendo, desde un enfoque interdisciplinario, los cuidados necesarios para abordar las múltiples dimensiones de la experiencia que sufren los pacientes y los miembros de la familia que se enfrentan a una enfermedad terminal. En este artículo se evalúan los conceptos fundamentales de una atención centrada en el paciente, cuando se trata de una enfermedad progresiva sin alternativas terapéuticas conocidas. La película Mi vida será utilizada como ejemplo a través del texto para comparar, contrastar y evidenciar las ideas principales. Hay un momento a través del tratamiento, donde parece ser "nada más que hacer", los cuidados paliativos proporcionan apoyo, con especial atención a la comunicación asertiva que facilita la confrontación familiar y personal en una situación de sufrimiento físico, mental y emocional. Una estrategia fundamental para abordar estos sentimientos es la intervención rápida, ayudando a planificar con antelación las decisiones sobre la atención y adaptando los esfuerzos para optimizar la calidad de vida del paciente y su familia. También apoya la reorientación de las intervenciones terapéuticas y considera alternativas como la sedación al final de la vida como una opción para controlar los síntomas refractarios.
Palliative care should be understood from a broader perspective rather than the notion of palliative medicine, offering, from an interdisciplinary approach, the required care to address the multiple dimensions of experience suffered by patients and family members facing a terminal disease. This article will assess the fundamental concepts of a patient-centered care, when it involves a progressive disease without known therapeutic alternatives. The movie My life will be used as an example through the text to compare, contrast and evidence the main ideas. There is a moment through the treatment, where it seems to be “nothing else to do”, palliative care provides support, with special attention to assertive communication that facilitates family and personal confrontation in a situation of physical, mental and emotional suffering. A fundamental strategy to address these feelings is a prompt intervention, by helping advance planning of decisions about care, and adapting efforts in order to optimize the quality of life of the patient and his family. It also supports the reorientation of therapeutic interventions and considers alternatives such as sedation at the end of life as an option to control refractory symptoms