IntroducciónLa esclerosis múltiple (EM) es una enfermedad desmielinizante del sistema nervioso central (SNC) que afecta a adultos jóvenes, ocasionando una variedad de síntomas (motores, visuales, control de esfínteres, alteraciones de la marcha) que impactan la funcionalidad del paciente; sin embargo, otros síntomas, como la disfunción sexual (DS), también pueden tener un efecto sobre la calidad de vida.DesarrolloLa DS puede presentarse en cualquier momento del curso de la enfermedad, su prevalencia varía entre 50 y 90%, puede ser secundaria a lesiones desmielinizantes en médula espinal y/o cerebro, ocasionada por síntomas que no incluyen directamente el sistema nervioso —fatiga, aspectos psicológicos, sociales y culturales—. Si bien se ha logrado establecer su prevalencia y su impacto sobre la calidad de vida, la DS todavía es una condición frecuentemente subestimada, razón por la cual en este artículo se revisan las diferentes escalas que ayudan a evaluar la presencia o la severidad de esta para dar un manejo multidisciplinario temprano, según corresponda.ConclusiónCinco cuestionarios han sido evaluados y/o diseñados para pacientes con EM, los cuales podrían identificar la presencia de DS, su etiología y, con esto, determinar posibilidades de tratamiento. La EM debe ser comprendida como una enfermedad compleja que abarca y compromete diferentes aspectos de la salud de los pacientes, y va más allá de solo medir escalas de discapacidad.
Introduction: Multiple sclerosis (MS) is a demyelinating disease of the central nervous system (CNS) that affects young adults, causing a variety of symptoms (motor alterations, visual alterations, loss of sphincter control, gait alterations) that impair the patient's functional status. However, other symptoms, such as sexual dysfunction, can also have an effect on quality of life. Development: Sexual dysfunction can occur at any time during the course of the disease; its prevalence varies between 50% and 90%, and it can be secondary to demyelinating lesions in the spinal cord and/or brain or caused by symptoms that do not directly involve the nervous system (fatigue; psychological, social, and cultural factors; etc.). Although its prevalence and impact on quality of life are well known, sexual dysfunction is still frequently underestimated. Therefore, in this article we review the different scales for assessing presence or severity of sexual dysfunction, in order to offer early multidisciplinary management. Conclusion: We evaluated 5 questionnaires that could identify the presence of sexual dysfunction in patients with MS and determine its aetiology, assisting in treatment decision making. MS must be understood as a complex disease that encompasses and compromises different aspects of patients’ health, and goes beyond simply measuring disability.