El trabajo que sigue tiene como objeto resaltar el sello moral de la labor del reportero para mejorar la calidad del relato elaborado en el momento de cubrir acontecimientos que conllevan algún tipo de desconsuelo y pena en torno a las víctimas que allí se producen. El camino a seguir parte de los valores interpretativos que requiere el periodista marcados por la necesidad de entender las razones que antecedieron las acciones no solo humanas sino naturales, finalmente objeto de la mayor atención informativa, sobre todo, en tales hechos de dolor. Entre estos valores, se destacan el respeto que le permite al reportero acceder a una mejor consciencia de sí mismo ante otros que como él pueden ser objeto de informaciones angustiosas, la solidaridad que posibilita compartir con las informaciones emitidas, sentimientos y frustraciones y la confianza que dispone la situación informativa compleja para ser tratada con el mayor cuidado y discreción. En últimas, el cubrimiento periodístico en situaciones de duelo bajo esta estimación proporciona una variación o transformación de la noticia respecto de la calidad del tratamiento del dolor, ya que, aunque las víctimas son siempre objeto del mayor interés informativo, no siempre se logra calidad en los términos más adecuados a su propia vulnerabilidad. Así, la calidad de la información periodística se presentará como una transformación del acto informativo en relación con la búsqueda, la elaboración y la difusión de relatos de dolor y muerte, ligada en el proceso por la acción propia de lo que hace el periodista y la noción de valor agregado sobre lo que informa.
The purpose of this paper is to highlight the moral nature of the reporter's work in order to improve the quality of the story when covering events that involve some kind of grief and sorrow for the victims. The solution starts from the interpretive values that are required from the reporter, marked by the need to understand the reasons preceding human and natural actions, which are finally subject to the greatest media attention, particularly in such painful acts. Among these values, we highlight the respect that allows reporters to access a better self-awareness before others who, like him, can be the object of distressing information, the solidarity that makes it possible to share with the information given, the feelings and frustrations, and the trust that the complex informative situation will be treated with the greatest care and discretion. Ultimately, the journalistic coverage in situations of grief provides a variation or transformation of the news regarding the quality of the handling of grief, because, although victims are always the object of greater informative interest, quality is not always achieved in the most appropriate terms according to their own vulnerability. Thus, the quality of the journalistic information will be presented as a transformation of the informative related to the search, elaboration and dissemination of stories of grief and death, linked in the process by the very action of what the reporter does and the notion of added value about what is being reported.