The Civil Sphere in Latin America, publicado por la Cambridge University Press en 2018, refleja un trabajo conjunto de autores que reflexionan alrededor de la teoría de la esfera civil de Jeffrey Alexander, para exponer de manera rigurosa la forma en que en América Latina se ha venido modificando la relación entre Estado y sociedad. Se trata de una obra colectiva editada por lo profesores Jeffrey Alexander y Carlo Tognato, estructurada en cuarto partes antecedidas de una introducción, y en la que se describen ocho estudios en distintos países latinoamericanos, incluso algunos de ellos en regímenes cuyo carácter liberal es fácilmente puesto en entredicho.El concepto de sociedad civil, como bien se afirma a lo largo del texto, ha sido tradicionalmente difícil de asir, y su uso indiscriminado, vago y gaseoso ha dificultado su análisis riguroso. En este texto, se trata de explorar el concepto atándolo a la noción de democracia y centrándolo en el espacio político latinoamericano, una aproximación, sin duda alguna, pertinente especialmente por los cambios políticos que han derivado en un cambio sustancial en la relación entre el Estado y la esfera civil en el último tiempo. El principal marco conceptual al que se apela es el de Jeffrey Alexander y su denominada teoría de la esfera civil, que la reconoce como un fenómeno que, a diferencia de lo que se piensa comúnmente, no es exclusivo de la modernidad, y que se inscribe en una lógica universalista, pues, como bien se afirma, “incluso en contextos de opresión y autoritarismo existen formas de esfera civil” (p. 242). Esta reflexión sirve no solo para entender el fenómeno de forma abstracta, sino que es útil para comprender la emergencia en otras latitudes de distintas expresiones de la esfera civil que tienden a condicionar a los regímenes políticos y a la construcción del Estado-nación.El texto parte de la presunción de que existía una idea de sociedad civil desde la misma formación de las naciones latinoamericanas (p. 3). En efecto, en el auge del discurso independentista nacía una incipiente “sociedad civil” como un movimiento con aspiraciones universalistas, racionales e inscritas en el pensamiento liberal. Esto fue bien importante para la adopción de una forma de Estado y de un sistema político (al menos en términos de ideal). Desde ese entonces, la sociedad civil experimentó tanto retrocesos como avances sin que pueda considerarse en ningún caso que se haya tratado de un fenómeno lineal o evolutivo. De hecho, a lo largo del libro se observa que las expresiones de la esfera civil son más bien asimétricas y varían de un contexto a otro. Los retrocesos y progresos se aprecian en los períodos de autoritarismo, en los que se asistió a una evidente contradicción entre las limitaciones propias de regímenes autoritario-populistas y los avances sociales que contribuyeron a la modernización. Estos regímenes, aunque con visos de autoritarismo, llenaron algunas de las expectativas de dicha esfera civil, especialmente en lo material (p. 4).