Se estudia el efecto sobre la violencia de la llegada de grupos previamente excluidos (en particular,de izquierda) a la oficina ejecutiva local de los municipios colombianos. Utilizando una regresiónde discontinuidad, mostramos que mientras la violencia de las guerrillas de izquierda y el gobiernono se ve afectado cuando la izquierda gana las elecciones a la alcaldía, los ataques de los paramilitares de derechaaumento de entre cuatro y cinco por cada 100.000 habitantes, casi el triple con respecto a la muestray cerca del 80%-100% de una desviación estándar. Interpretamos este aumento de la violenciacomo una reacción de facto de las élites políticas y económicas tradicionales que tratan de contrarrestar el aumentoen el poder de jure de los forasteros después de ganar el cargo. De acuerdo con esta interpretación,encontramos que el aumento de la violencia se concentra en el año de las siguientes eleccionesy como resultado, los titulares del ala izquierda disfrutan de una desventaja de ocupación de puestos mayor que otrasde los partidos tradicionales en Colombia. También encontramos (más evidencia tentativa) que la izquierda implementalas políticas agrarias que amenazan a los aliados más notorios de los paramilitares: grandesterratenientes. Estos efectos ponen de relieve los riesgos no deseados de la inclusión política en las sociedadescon instituciones débiles, una presencia desigual del estado a través de su territorio, y características deel autoritarismo subnacional.
We study the effect on violence of the arrival of previously excluded groups (in particular,left-leaning parties) to local executive office in Colombian municipalities. Using a regressiondiscontinuity approach, we show that while violence from left-wing guerrillas and the governmentis unaffected when the left wins mayoral elections, attacks by right-wing paramilitariesincrease by about four to five per 100,000 inhabitants, almost a tripling relative to the samplemean and close to 80%-100% of a standard deviation. We interpret this increase in violenceas a de facto reaction of traditional political and economic elites trying to counteract the increasein de jure power of outsiders after they win office. Consistent with this interpretation,we find that the surge in violence is concentrated in the year of the subsequent electionsand as a result left wing incumbents enjoy an incumbency disadvantage larger than otherincumbent parties in Colombia. We also find (more tentative evidence) that the left implementsland policies that are threatening to the most notorious allies of paramilitaries: largelandowners. These effects highlight the unintended risks of political inclusion in societieswith weak institutions, an uneven presence of the state across its territory, and features ofsubnational authoritarianism.
